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ANESTESIA
¿Cómo es la anestesia en una operación de alargamiento de pene?
La anestesia en la cirugía de alargamiento y engrosamiento de pene busca que el paciente esté confortable durante el procedimiento y una recuperación precoz.
Es frecuente que los pacientes acudan solos a este tipo de cirugía, por miedo al qué pensarán, ya que todavía existe un desconocimiento social de la normalidad de esta cirugía en muchos países. Si bien siempre es recomendable acudir acompañado la anestesia epidural permite una recuperación exprés y evita que el paciente esté intubado o con anestesia general, algo que condicionaría un mayor postoperatorio.
En alargamiento de pene se emplean diferentes técnicas anestésícas dependiendo de cada paciente. En el grueso de las ocasiones se trata de una sedación suave, si bien en casos más complejos empleamos anestesia epidural, para ello se realiza un suave pinchazo en la espalda quedando el paciente con su zona abdominal inferior pubis y piernas dormidos.
Existen pacientes con miedo a la cirugía que desean acompañar esta técnica de una sedación, mediante la cual el paciente permanece dormido durante la cirugía, si bien, del mismo que mediante una epidural la recuperación es rápida y no se requiere de incubación o anestesia general.
Para aquellos pacientes con dificultades anestésicas para la realización de la anestesia epidural por problemas en su espalda o similares la cirugía de alargamiento y engrosamiento de pene puede realizarse con sedación únicamente.
En los casos en que se emplea anestesia epidural el paciente notará como un peso en sus piernas y dificultad progresiva para su movimiento que irá desapareciendo conforme cese el efecto de la anestesia.
La estancia hospitalaria suele ser ambulatoria, es decir, el paciente regresa a su domicilio en el día. Para ello es importante que camine con naturalidad y habiendo recuperado la sensibilidad por completo en sus piernas, así como que el paciente haya orinado antes de abandonar el centro médico.